Dios lo ha sido todo para él por lo que perderlo es perderlo todo. Por eso el don del temor de Dios es un respeto alrededor de Él. Esto lleva a un sano alejamiento del pecado y de las ocasiones de pecar. Porque la separación de Altísimo es peor que cualquier mal.Para ello, necesitas encender una vela de color rojo y realizar con mucha fe la ora